Heima

Miércoles de abril , después de los días anteriores no quedaba mucho por hacer, no existían las ganas de crear cosas, de proyectar presente-futuro. Decidí entrar, una cerveza no me haría mal; ya dentro la cosa se puso peor.
Después de unas dos botellas te vi entrar, traté de disimular un poco mi tristeza y de la nada salí a bailar. El ritmo era monótono, la canción un asco, la compañía solitaria.
Aún no recuerdo bien como es que me invitaste a tu lado, yo esperaba que llamaras a mi acompañante de al lado, me confundí un poco, tal vez ese personaje estaba muy ocupado, pero no, era yo la que se sentó a tu lado, la que en un estado volátil sintió tu presencia, la que se enmudeció al saber que eras tú.
El beso fue parte del inicio más cósmico que tuviese que descifrar, tu mano segura sacándome de aquél local, el viaje en micro, ya no había nada más que preguntar.
Sin darnos cuenta terminé un miércoles de abril muy distinto al anterior en tu hogar, la simbiosis recorría fragmentos de la habitación, la posibilidad de enamorarnos era perfecta y extensa. Y desde allí un mes, un mes en que la felicidad se presenta día a día con solo tenerte, mirarte y poder pronunciar sílabas armónicas que se funden en el entorno, un mes y muchos más , un mes de sensaciones tan sinceras, un mes en el que sabemos lo que somos el uno para el otro, donde la búsqueda ha terminado, donde todo es real.


Te amo bonito ♥
eres el mejor pololo del universo !
gracias por entender mis conductas plutonianas hahaha (:
te amo te amo te amo !